viernes, 22 de diciembre de 2017

Los arciprestazgos comienzan a visitar la Exposición Vocacional "ENREDADOS" en los primeros meses del curso



https://photos.google.com/share/AF1QipOAl52EpktOqSTyo619BhKDyVOKpz-xdVupL92Co05fqcPYlkROeYMcbCwb1n-M6Q?key=emplTHBiU0FHVVF3QWgxYjhWU1o1RkZlNEpmWUtR
Durante el trascurso del fin de semana del 16 y 17, y los días 19 y 20 del pasado diciembre, han tenido la oportunidad de pasar por el Seminario diocesano, para visitar su Exposición Vocacional más de 400 chicos y chicas de distintos arciprestazgos y colegios de nuestra geografía diocesana.
En esta ocasión, nos visitaron unos 230 chicos del arciprestazgo de Martos-Torredonjimeno y de Mágina el sábado, unos 120 del arciprestazgo de Bailén- La Carolina, a los que se sumaron casi 60 chicos de 1º y 2º de bachillerato del Colegio Santa Catalina de Alejandría de Jaén entre el martes y miércoles siguientes. En este recorrido vocacional, los jóveneshan tenido la ocasión de descubrir distintas vocaciones a las que el Señor puede llamar, muchas de las cuales no se suelen ofertar en la sociedad como un futuro para los jóvenes. A la vez que visitaban y conocían las dependencias de nuestro Seminario con los seminaristas como guías, culminando con una pequeña oración para pedir, concretamente, por las vocaciones al sacerdocio, uniéndonos a la oración de nuestro padre y Pastor, Don Amadeo. La jornada terminaba compartiendo un rato de convivencia todos juntos.
Ha sido una gran alegría para nosotros, los seminaristas, haber podido compartir nuestro alegre testimonio vocacional a la par que mostrábamos, junto con los colaboradores de esta exposición, el amplio abanico de vocaciones a las que el Señor llama para realizar su proyecto en cada uno de nosotros. El Señor, a través de su llamada, busca nuestra felicidad y la unión de Él con nosotros y, aunque muchas veces no veamos claro cuál es el camino correcto o qué es exactamente lo que él pide, nos pide que confiemos en Él como lo hizo María, la joven de Nazaret que se fio de Dios y, pese a las dificultades, dio su sí generoso. Que Ella, Madre de los sacerdotes, Madre de las Vocaciones, nos lleve de la mano por el camino que Dios nos marca para nuestra felicidad y que nosotros seamos valientes para realizar el proyecto de Dios en nuestras vidas.
José Manuel Espejo Martínez
Seminarista