El último fin de semana de octubre la Delegación
Diocesana de Juventud citaba a los jóvenes a la ya conocida Peregrinación y
Encuentro que tiene lugar en el cerro de la Virgen de la Cabeza. Los
jóvenesjiennenses que asistieron, aproximadamente unos ochenta, han vivido durante todo el fin de semana
momentos de oración y de encuentro con Cristo, yademás han tenido la
oportunidad de llenarse de la Misericordia del Padre con la celebraciónpropia
del Jubileoque se convocaba para los jóvenes de la diócesis, presidida por el
Obispo, Don Amadeo Rodríguez Magro.
El encuentro comenzaba el viernesdía 28. A media
tarde partía el autobús de Jaén rumbo a la parroquia de San Eufrasio en
Andújar. Al llegar, todos los jóvenes empezaron a saludarse y encontrarse
de nuevo. Para algunos era la primera vez que iban a participar en la PEJ.
El primer día comenzaba con el tradicional Adoremus,en
esta ocasión en la Parroquia de San Eufrasio.Durante el mismo,Andrés e Inma, dos jóvenes implicados en la Delegación de
Juventud, ofrecieron un increíble testimonio en torno a la experiencia vivida
en la JMJde este verano en Cracovia (Polonia). Según el testimonio de Andrés,
el Señor había querido provocar que él le pidiera matrimonio a la que hasta ese
momento era la chica con la que compartía su vida.
Tras esta primera parte del Adoremusse celebró la
Santa Misa, que fue presidida por el Vicario D. Raúl Contreras y concelebrada
por varios sacerdotes, entre ellos los párrocos de Andújar. A continuación se
expuso al Santísimopara invitar a los jóvenes a una oración personal con Jesús,
acompañados con meditaciones y cantos preparados por las Hermanas Nazarenas. Durante
el tiempo de adoración, todos los sacerdotes congregados para la ocasión impartían
el Sacramento del Perdón a quien sentía la necesidad de reconciliarse con Dios.
Fueron unos momentos intensos de oración y agradecimiento “al que todo lo
puede” y al que nos había congregado para pasar un fin de semana increíble,
como después se comprobó.
El sábadoa las 6 de la mañana se iniciaba la
peregrinación hasta el Santuario de la Virgen de la Cabeza por el tradicional
camino viejo que atraviesa Sierra Morena. Cada cual, a su ritmo, afrontamos los
distintos tramos del camino. Fue una oportunidad para compartir con los demás
jóvenes nuestras propias experiencias a la vez que caminábamos y disfrutábamos
del bello paisaje de la naturaleza con un día de sol radiante.También, como es
tradicional, algunos peregrinos que hacen el camino por primera vez fueron
bautizados simbólicamente como nuevos peregrinos de la Virgen de la Cabeza.
Sobre las 12 comenzaron a llegar a la casa hermandad de Andújar los primeros
peregrinos, hasta las 14:30 que era el almuerzo.
Tras un rato de merecido descanso, a las 18:30 disfrutamos
con un juego de rol inspirado en la Parábola del “Buen Samaritano”.
Distribuidos por todo el recinto del Santuario, varios compañeros y
colaboradores de la Delegación se disfrazaron de personajes bíblicos, los
cuales hacían pruebas a los diferentes equipos, para que de esta forma
consiguieran las pistas u objetos necesarios para dar respuesta al enigma
planteado: “¿por qué nadie había querido ayudar al hombre atacado de la
Parábola, y sólo lo hizo el “buen samaritano”?” Ganar o perder era lo de menos.
Pasarlo increíble: la tónica general.La respuesta a ese enigma era que el buen
Samaritano se dio cuenta de la Misericordia de Dios, y eso fue lo que le movió
para atender a aquel pobre hombre.
Acabado el juego, en el que habíamos seguido uniendo
lazos de amistad, llegó el tiempo de oración y recogimiento ante la Virgen de
la Cabeza, patrona de la Diócesis para dar gracias, pedir y venerar su imagen.En
este rato del Santuario pudimos comprobar tras un mimo realizado por Jesús
Vela, que ante la realidad Dios nos pide que nos levantemos de nuestros
sillones y comodidades, para que salgamos al mundo a proclamar la alegría del
Evangelio y la Misericordia de Dios.Tras la cena, los seminaristas organizaron
el juego de las palabras donde, la nota predominante, fue el buen ambiente y
las risas, que resonaban por todos los pasillos de la Casa Hermandad.
El domingo comenzó con la oración de laudes yla
llegada de nuestro Obispo Don Amadeo. Vivimos con inmensa emoción la
celebración del Jubileo de la Misericordia, que se iniciaba desde la Casa
Hermandad en procesión. La peregrinación seguía en el arco de la plaza
principaldonde escuchamos la Palabra del Señor y unas palabras del Papa
Francisco de la Bula del Año de la Misericordia.Después nos dispusimos a subir
la calzada para atravesar la Puerta de la Misericordia, y terminar así reunidos en torno al altar, para compartir la
mesa de la Palabra y de la Eucaristía con el Pastor de nuestra Diócesis.Don
Amadeo en su homilía alentaba a los jóvenes a ser como Zaqueo: “jóvenes
buscadores de la Verdad del Amor De Dios” y nos invitaba a “abrirnos
a Cristo y su misterio”.
El resumende estos días
de Peregrinación y Encuentro: días de alegría, de juventud, de excursión, de
ambiente increíble, de oración y de amistad. Y todo ello, como empezaba
diciendo, en torno al Señor y a Nuestra Madre. ¿Cuánto falta para la próxima?Mientras
tanto sigamos dando testimonio de la Alegría de vivir el Evangelio.
Jesús Llopis, Seminarista
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